sábado, 29 de junio de 2013

AFIRMA Plotino que existen lazos naturales y sobrenaturales entre el hombre y el cosmos. Dice textualmente Plotino al respecto: "No hay azar en su vida, sino una armonía y un orden únicos". Culmina esta indagación de su propia existencia con una afirmación no pocas veces subrayada por lo que tiene de platónica: "los acontecimientos de aquí abajo se producen de acuerdo con las cosas celestes".

La primera vez que leí algo referido a las ciudades celestes, más aún, a la realidad celeste que se vislumbra en la tierra como símbolo de otra realidad emulada, a la que puede llegarse tras la contemplación, fue en un texto de María Zambrano hablando de Florencia. Era una entrevista y las preguntas se las hacía mi admirado poeta Antonio Colinas. 

En este tiempo se van aclarando muchas cosas en lo ético y en lo estético. Pensaba que todo se debía a marros en el comportamento, desavenencias variadas, al poco entendimiento del fenómeno literario. Ahora me importa resguardarme en el silencio y en la soledad, en la contemplación y en los ecos del ancho universo que acoge este cuerpo de bóveda. Quiero escuchar la música de la noche, de los violines mojados, de la aurora con cuerpo de calandria.