domingo, 26 de abril de 2015

¿CUÁL  es el lugar de la inteligencia en todo esto? Esta pregunta, pronunciada por Job en plena desolación, la he convertido en una prerrogativa personal. Tomar consciencia de uno mismo y del mundo que lo rodea arroja la capacidad de establecer cartografías mentales y temporales en nuestra memoria. En ellas he querido ver lo que no vi; evidenciar lo que nunca antes había sentido. Vivir, si acaso, la vida desnuda.
Como un bostezo contenido, que se originara en el centro del estómago y todo lo detuviera, la respiración y la pausa lo toman todo. Se acompasa el mundo a la lentitud de la respiración y a la apertura hacia lo incierto, como deseaba Hölderlin.  Aquí un hombre simple.