jueves, 9 de febrero de 2012


CASI con la emoción de entonces, escribo ahora estas palabras de Thomas Mann que pertenecen a Doktor Faustus. En ellas, encuentro una palabra razonadora, que remite a la simiente de todo. El pasaje está protagnizado por Kretzschmar y trata de dilucidar la "subjetividad armónica" y la "objetividad polifónica": "Del encuentro de la grandeza y de la muerte, añadía, nace una objetividad hasta cierto punto convencional, cuya soberana belleza supera a la del más desenfrenado subjetivismo porque en ella lo exclusivamente personal, el dominio de una tradición llevada a su más alta cumbre, se supera a su vez y, en plena grandeza espiritual, accede a lo mítitco y a lo colectivo".

***
CON M.C. nos hemos propuesto ir traduciendo algunos pasajes de Zibaldone. Será la primera vez que trabajemos juntos en una empresa literaria, aunque quizás, debería utilizar otro verbo, pues la traducción es un tentáculo de la creación. Le he propuesto que, a partir del texto italiano, vayamos traduciendo aquellas líneas que nos agraden especialmente. Ella se ha quedado conmovida, pues no sabía, en principio, cuál era la intención de la propuesta. La intención, le dije con claridad, es la de escribir la lectura de un autor fundamental, la de vivir con Leopardi juntamente, en su palabra. La intención de ser y estar en Leopardi, es decir, en la palabra.