E. es una caricia desde dentro, es la plenitud de las horas medianas y una espuma nimbada de proverbios. E. es un iris y una paz, un horizonte recogido en mis ojos sonámbulos por este prodigio que ciega y restituye. E. es la lección mayor de la vida en nuestras vidas, de la vida esencial, indudable, que ahora se conmueve. Los filósofos enseñan que detrás de un hombre o quedan actos o quedan palabras. E. es el acto anhelante, su cuerpo es el testamento de la tierra entre mis manos: actos puros. Emoción. Amor. Poesía.